Previsiones de empleo verde en la industria

El actual contexto socioeconómico facilita múltiples posibilidades para el conocido como empleo verde en relación a los nuevos modelos de producción y consumo sostenibles.

El empleo verde abarca desde actividades específicas relacionadas con el medio ambiente, hasta toda una amalgama de trabajos y nuevas ocupaciones destinadas a la adecuación de los procedimientos productivos y estándares empresariales respetuosos con el medio ambiente.

El impacto laboral de la economía verde es transversal y supone una oportunidad para todos y cada uno de los sectores de actividad.

El lanzamiento de estrategias internacionales como los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por Naciones Unidas o la Agenda 2030 de la Unión Europea, está impulsando un cambio de paradigma equiparable al actual de las energías renovables. La derogación del conocido como “impuesto del sol” y la aprobación del R.D. 244/2019 donde se regulan las condiciones administrativas, técnicas y económicas del autoconsumo de energía eléctrica, han supuesto la inmediata reactivación del mercado energético. Según REE[1],  las renovables representan ya el 49,3 % del total del parque generador de energía eléctrica en nuestro país, y el 58,6 % fue libre de emisiones de CO2 a la atmósfera.

En términos de empleo, ello supone múltiples nuevos puestos cualificados a cubrir por las empresas y la creación de nuevos empleos específicos. Nos referimos a los instaladores de sistemas eólicos, fotovoltaicos o solares térmicos, que precisan una cualificación mínima de FP de grado superior, incluyendo las especialidades en Mantenimiento y Servicios a la Producción, Electricidad y electrónica, Mecánica, Instalador de sistemas fotovoltaicos y eólicos de pequeña potencia.

A estas ocupaciones se unen otras relacionadas con la inclusión de las nuevas tecnologías, el paradigma de Internet of Things, la Inteligencia Artificial, el desarrollo de nuevos materiales y sistemas de producción más eficientes o la especialización en el manejo en drones. Está teniendo un gran impacto el uso de este tipo de aparatos para multitud de actividades, como la detección de anomalías en instalaciones fotovoltaicas mediante termografía, vuelos para labores de evaluación topográfica, o para el uso en gestión y vigilancia forestal, además de actividades relacionadas con la fumigación y control de plagas en agricultura.

A ello se une el auge del vehículo eléctrico y todas las actividades relativas al despliegue de infraestructuras de recarga. Nuestra sociedad precisa afrontar un reto de enorme magnitud: la adaptación de la red urbana y comunicaciones con la finalidad de garantizar la carga de estos automóviles. 

Aún cuando la cuota es 1% respecto al parque automovilístico, la progresiva matriculación de vehículos eléctricos, (un incremento un 56,3% en 2019 respecto el año anterior según datos de AEDIVE[2]), sumado a las políticas de drástica reducción de emisiones impuestas por la Unión Europea, hacen que este reto no sea utópico. Por tanto, los instaladores y mantenedores eléctricos, con su formación en los ciclos Medio y Superior de electricidad de FP cobrarán un nuevo auge.

En este ámbito emerge uno de los aspectos fundamentales referido al empleo verde: la continua formación de los actuales empleos para acometer con garantías de las labores comprendidas en estos nuevos ámbitos. La formación de los mecánicos en aquellas tecnologías híbridas y eléctricas adquiere una especial relevancia para incrementar la confianza tanto en la funcionabilidad del vehículo como en el valor añadido del uso de un vehículo eléctrico. En FEMPA están asociados cerca de 800 talleres de automoción que continuamente están recibiendo formación en estas tecnologías.

La economía verde supone uno de los pilares fundamentales para adaptar el modelo productivo actual. Comienza a imponerse la tendencia por la cual a las empresas se las reconoce por el número de nuevas tecnologías que implemente en su cadena de valor. Las empresas multiplican su valor cuando son reconocidas por aplicar soluciones en el entorno de la industria 4.0, implementa un sistema de gestión y reutilización de residuos o aplica políticas de simbiosis industrial con diferentes partners. Por tanto se abren amplias posibilidades para los expertos en simbiosis industrial y los expertos en economía circular.

Por ejemplo, la gestión de residuos y el tratamiento eficiente de las materias primas supone un enorme campo de actualización y creación de empleo. Desde hace varios años se están impulsando cambios normativos para instaurar dinámicas de trabajo más eficientes, diseño y adaptación de las cadenas productivas a través del concepto de las 3r (reducir, reutilizar y reciclar) así como la intensificación del ecodiseño y la simbiosis industrial. Sin ir más lejos, el paquete de directivas 2018/849  a 2018/852 aprobadas en 2018[3] han establecido objetivos vinculantes para los estados miembros relacionados con la disminución de residuos y un uso sostenible y eficiente de los recursos.

El denominado empleo verde es un entorno óptimo para la creación de nuevas ocupaciones relacionadas con la valorización, tratamiento y clasificación de residuos, así como tratamiento de residuos peligrosos, que precisan de técnicos con una cualificación mínima de FP de grado superior, especialidad en mecánica, electricidad o química industrial.

A ello se suman nuevas ocupaciones de personal especializado en tratamiento de aguas, espacios naturales, prevención y control de la contaminación atmosférica o recuperación en suelos contaminados.

En complemento, los expertos en ecodiseño y todos aquellos nuevos perfiles que aporten una adecuada gestión para propiciar una segunda vida a los residuos facilita la creación de nuevas empresas con soluciones tecnológicas aplicables a este ámbito.

En este sentido FEMPA ha intensificado su apoyo y colaboración con las instituciones que promueven e impulsan este tipo de empresas tecnológicas y startups. El objetivo principal es facilitar a los emprendedores la puesta en marcha de sus iniciativas de negocio e integrarlos en el tejido industrial de la provincia. Sin ir más lejos, FEMPA participa en la 9º edición de la Maratón de Emprendimiento organizada por el Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández, reconociendo a la iniciativa GreenBox, un proyecto focalizado en el desarrollo de dispositivos modulables de fácil uso para la monitorización de la calidad ambiental.

Uno de los principales ámbitos de actuación para la creación de empleo verde proviene de las mejoras en las condiciones de trabajo en las áreas industriales. En este aspecto destaca la reciente y pionera Ley 14/2018, de 5 de junio, de gestión, modernización y promoción de las áreas industriales de la Comunitat Valenciana. Esta ley proporciona el contexto necesario para la creación del gestor de equipamientos industriales, como una nueva ocupación incluida en el ámbito del empleo verde.

Este agente tendrá las funciones de promover dinámicas de simbiosis industrial entre las diferentes empresas de los parques en los ámbitos energéticos, tratamiento y gestión de residuos, optimización del uso y funcionalidad del equipamiento, así como todas aquellas actividades que repercutan en una mejora de la calidad en el trabajo. Esta figura es clave para el impulso de las áreas industriales como espacios referentes e imprescindibles para la mejora de la competitividad de las empresas y su alineamiento con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y la agenda 2030 del Gobierno de España.

Más información | Publicación Diario Información: Los yacimientos de empleo verde en la provincia