efe/madrid 09.12.2013 | 15:36
El ministro de Industria, José Manuel Soria, ha dicho este lunes que el Gobierno y las eléctricas “técnicamente” deben buscar una fórmula para que el déficit eléctrico sea avalado por el Estado, pero “siempre y cuando haya un compromiso” de las empresas para no recurrir la normativa en los tribunales.
En declaraciones a los medios en el marco de un encuentro empresarial organizado por las Cámaras, Soria ha señalado que si las empresas lo recurren “podría haber una repercusión en los precios y, en ese caso, desde luego, el Gobierno no concedería ningún tipo de aval”.
El ministro ha señalado que el Ministerio de Hacienda y las empresas del sector actualmente mantienen conversaciones para ver cuáles son las condiciones bajo las que el déficit del sector puede contar con aval público.
Según ha dicho, el Gobierno ha eliminado la aportación al sistema eléctrico que tenía comprometida en 2013 (3.600 millones de euros) debido a que hay “un objetivo superior, que es el déficit público”.
“Si el déficit público estuviese en un nivel superior o muy superior al que hemos estimado como objetivo, los efectos serían peores para la economía en su conjunto”, ha sentenciado.
Por otro lado, en cuanto a las denuncias ante organismos internacionales de las empresas de renovables por los recortes en la retribución que reciben, Juan Manuel Soria ha señalado que el Gobierno lo que ha hecho es “sentar una rentabilidad razonable” para todas las actividades reguladas, tanto primas a las renovables como transporte y distribución de electricidad.
El titular de Industria ha dicho que las empresas hicieron inversiones considerando una rentabilidad del 20 % durante toda la vida útil de la instalación, algo que no ocurre en ningún lugar del mundo y que si se diera el resultado es que el sistema eléctrico quebraría.
Asimismo, ha reiterado que la reforma eléctrica tiene como objetivo dar estabilidad financiera al sistema eléctrico para que el precio de la electricidad en España esté en la media europea y lograr una economía competitiva por la vía de los costes eléctricos.