Se han anunciado nuevas medidas de reactivación económica para ayudar a la recuperación a lo largo de este año. Se trata, en primer lugar, de una prórroga mejorada del Plan PIVE (Programa de Incentivos al Vehículo Eficiente), que se puso en marcha en 2012 con ayudas de hasta 2.000 euros. Además, el Ejecutivo pondrá en marcha otro plan, el PIMA-AIRE, dirigido a los vehículos comerciales,y en concreto a las furgonetas.
El Plan PIVE se prorrogará con una dotación de 150 millones de euros, el doble que en 2012. Además, se disminuirá la antigüedad requerida y se elimina el tope puesto en el precio del automóvil, que estaba situado en 25.000 euros. En 2012, con el Plan PIVE actual se vendieron 75.000 vehículos en España. De ellos, la venta de un tercio no se habría producido sin esas ayudas. Supusieron 105 millones de retorno solo en impuestos, y otros 930 millones en valor añadido por la actividad comercial. Se mantuvieron 4.500 empleos.
En cuanto al Plan PIMA-AIRE, para vehículos comerciales, su objetivo es renovar el parque de ese tipo de vehículos, y en concreto de las furgonetas (el 40 por ciento son de producción nacional). Este Plan tiene un mercado potencial de 50.000 vehículos, y se pueden crear 700 puestos de trabajo directos e indirectos. Se espera que genere 50 millones en incremento de producción y empleo.