El parque móvil de la provincia se renueva con 54.000 coches 

Casi la mitad se destinaron a alquiler. Los concesionarios confían en que en 2016 se crezca un 10% y los talleres alertan de la antigüedad de los automóviles y la falta de conservación. La provincia de Alicante cerró 2015 con 54.494 nuevas matriculaciones de coches, un 21% más que un año antes. El despegue del consumo interno y la mejora de la financiación, junto al Plan PIVE, explican unas cifras que, aunque aún se sitúan lejos de los niveles precrisis, al menos ya permiten encadenar varios ejercicios de subidas consecutivas tras los desplomes que se habían ido registrando desde 2007.

Incluso en el conjunto de España se superaron las 1,1 millones de unidades vendidas, según los datos que hicieron públicos ayer las patronales del sector Anfac, Faconauto y Ganvan, volviéndose así a guarismos que no se conocían desde 2008. Precisamente Ginés Pérez, propietario de Autonáutica, el concesionario que comercializa en la Marina Baixa la marca Ford –la más vendida en 2015 en esta provincia con 8.433 unidades–, detalla que este incremento en las ventas se ha producido en todos los canales, tanto en particulares, como en empresas y rent a car, y las previsiones que manejan en el sector es que, como mínimo, a lo largo de este año se pueda registrar un nuevo aumento en las ventas de los coches, siempre y cuando la inestabilidad política no acabe por bloquear la situación económica y el consumo vuelva a retroceder. «Se ha registrado una subida importante este año, en la primera parte de 2015 sobre todo por los efectos del Plan PIVE, pero hay que tener en cuenta que en los años más duros de la crisis las ventas llegaron a caer hasta un 50%», detalla Ginés Pérez.

 Ahora bien, de un lado, prácticamente la mitad de las ventas de turismos en Alicante se formalizaron con empresas de rent a car. De hecho, los particulares se quedaron con 25.448 coches; las compañías de alquiler, con 21.548; y las empresas en general, con 7.498. De otro, como alertaron desde las patronales del sector, la edad media del parque automovilístico español se sitúa ya en los 11,6 años de media. Sin embargo, esa antigüedad del parque móvil, lejos de lo que se podría pensar, no ha disparado las visitas a los talleres de reparación. El efecto ha sido totalmente el contrario. No en vano, el presidente de la patronal del metal Fempa y de la Asociación de Empresarios de Talleres de Reparación de Automóviles y Afines de la provincia de Alicante (Atayapa), Guillermo Moreno, avisa de que, de media, la afluencia a estos establecimientos ha caído algo más de un 20% desde que empezó la crisis. «El parque móvil es antiguo y, además, el mantenimiento es deficiente, hasta el punto de que hay muchos vehículos circulando por las carreteras que no han pasado la ITV, con el peligro para la seguridad vial que eso supone», denuncia Moreno. La existencia de talleres clandestinos que no cumplen con la normativa y el hecho de que cada vez sean más los que deciden hacer ellos mismos el mantenimiento de sus vehículos explican este escenario. En esta línea, según los datos que manejan desde Atayapa, en los últimos años no sólo se ha disparado la venta de aceite en centros comerciales, sino también la venta de piezas a particulares en los desguaces. «El problema de fondo no es tanto la antigüedad como la falta de mantenimiento. Cada vez hay más gente que decide comprar el material por su cuenta y hacer los arreglos que necesita el coche, y eso es lo que está provocando que cada vez haya más coches que se incendian», por ejemplo, subraya Guillermo Moreno. «El problema es que cuando llamas a un fontanero clandestino el problema lo tienes tú en tu casa, pero cuando llevas el coche a un taller clandestino el problema lo tienen todos los que circulan por las carreteras», concluye el dirigente de Atayapa.

Fuente: www.diarioinformacion.com