Tras el cese de la difusión analógica y su sustitución por la digital. Las bandas que actualmente estaban siendo ocupadas por la televisión analógica convencional quedaron libres en gran parte, puesto que la televisión digital es del orden de seis veces más eficaz en cuanto al uso del espectro, pudiendo entonces ser asignadas a otros servicios. Esta “liberación de ocupantes” de las frecuencias de difusión actuales en la banda UHF y la consiguiente liberación de la banda de VHF, se conoce como “dividendo digital”.
El desalojo de la banda del dividendo digital, actualmente empleado por la TDT y que debe pasar a manos de las operadoras para la banda ancha móvil, obligará a llevar a cabo un segundo apagón, volviendo a adaptar las instalaciones de recepción de TV en los edificios.
El primer apagón analógico en el que se reubicaron gran parte de los canales de televisión en la parte alta de la banda de los 800 MHz, fue un paso intermedio hasta la situación final, donde las frecuencias que ocupan ahora muchos de los canales de TDT (del 61 al 69), pasarán a manos de las operadoras de telefonía móvil para ofrecer conexiones de datos.
El Dividendo Digital brinda la oportunidad de introducir la 4ª Generación de Telefonía movil, así como asegurar la cobertura de la banda ancha movil ultrarrápida al 98 % de la población, facilitando el cumplimiento de los objetivos de la Agenda Digital para Europa y contribuyendo decididamente a reducir la brecha digital.
Descárguese el Plan Marco de actuaciones para la Liberalización del Dividendo Digital 2012-2014